domingo, 30 de abril de 2017

Lucha de clanes por la atención mediática

LA FAMILIA PUJOL DENUNCIARÁ A LA FAMILIA RUIZ-MATEOS POR INTRUSISMO




-"Nosotros estábamos antes" –ha denunciado la matriarca del clan de los Pujol, Marta Ferrusola, antes de mandar a la merda a uno de nuestros reporteros


La familia Ruiz-Mateos aduce que su patriarca ya choriceaba mucho antes de que al suyo siquiera le cantaran eso de Puyol enano habla castellano



La lucha de ambos clanes por liderar la atención mediática en los entramados corruptos supone un nuevo enfrentamiento entre Madrid y la Generalidad





Lo que más indigna al clan de los Pujol no es que a su hijo mayor Jordi no le dejen poner la televisión de plasma 50 con tecnología 4K en su celda de Soto del Real, sino que la atención mediática que gozaba plenamente la familia se haya desviado parcialmente por la repentina intromisión del clan Ruiz Mateos en el foco judicial, restándoles el bien ganado protagonismo del que hasta hace unos días gozaban en lo que a delictividad de clanes familiares delictivos se refiere. 

-La gente se cree que nos disgusta salir en la tele acusados de corruptelas. Todo lo contrario, estamos encantados de que se nos preste la atención que merecemos, dado el  doble referente moral y social que ejercemos en la sociedad catalana -ha dicho uno de los hijos Pujol en un perfecto catalán -Que hablen de mí aunque sea bien –ha concluido este perfecto hijo de Pujol.

Por su parte los Ruiz Mateos defienden la hegemonía de su clan familiar esgrimiendo que ellos estaban en el punto de mira de la atención judicial y la desaprobación social mucho antes que los Pujol comenzaran su carrera de ocultación y latrocinio.

-¿Qué pasa, que ya no se acuerdan de Rumasa? ¿eh? ¿Y de la nueva Rumasa? ¿eh? ¿eh?... - ha dicho con altanería un hijo de los Ruiz Mateos, no sabemos cuál porque es que son todos iguales y cuando se dan la vuelta ya hemos perdido las referencias -Nuestro padre choriceaba mucho antes que el suyo se dedicara a la política. Que se lo pregunten a Franco- ha concluido, con la voz entrecortada por la nostalgia de los buenos tiempos y la referencia al líder.

-Pues el que haya sido presidente de una Generalitat, que levante la mano –ha esgrimido con sorna otro de los Pujol, estamos entre Olegué y Oriol – lo que ha merecido la contundente réplica de uno de los Ruiz Mateos, concretamente…  bueno, de uno de los Ruiz-Mateos:

-Y el que su madre haya presidido un club de fútbol de primera división, que levante los deditos en V, como está haciendo mamá ahora…

Los hermanos Ruiz-Mateos lucharan por la hegemonía del clan familiar
en todo tipo de atenciones mediáticas

El encono de las posturas enfrentadas es tal, que parece ser que ambos clanes se han emplazado para discutir la situación y dirimir diferencias, si es preciso a bofetada limpia, antes de acudir a la vía judicial, no sea que salgan más cosas y se encarezcan las costas. Daba para un partido de fútbol, dada la cantidad de gente que son, pero prefieren un restaurante. El problema es que de momento  no se ponen de acuerdo en el emplazamiento. Los Ruiz-Mateos proponen el Diverxo, de honda raigambre vallecana, lo que le gusta mucho a la madre, a lo que los Pujol replican con un terreno más neutral, como El Celler de Can Roca, o en su defecto el restaurante del Liceo.
Parece que finalmente el terreno lo elegirá una mano imparcial, la del fiscal anticorrupción, Manuel Moix, cuya fama de ecuanimidad e imparcialidad traspasa fronteras. Todo apunta a que se decantará por los salones del empresario Arturo Fernández, cuya amistad con el honorable fiscal jefe aún no ha sido probada en absoluto.

A Ignacio González le gustaría competir. Pero con su hermano y su cuñado, de momento solo son tres. De momento.

Ignacio González y su hermano pugnando por la cama de arriba en Soto del Real



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